CHISTES ADULTOS en ROSARIO |
Una monjita se sube a un taxi en medio de la noche oscura en la ciudad.
El taxista durante todo el camino la observa por el espejo.
La monjita se da cuenta y le pregunta:
- Hijo... ¿Por que me miras tanto?
- Perdon madre, me da mucha verguenza decirselo, yo no quisiera ofenderla.
- Pero hijo mio, en mi vida yo he escuchado muchas cosas y no creo que puedas decirme algo que me pueda ofender.
- Bueno, yo toda mi vida he tenido la fantasia de que una monja me haga el sexo oral.
La monja, sorprendida, se queda pensando un momento y dice:
- Bueno, no se, en primer lugar tendrias que ser catolico y después tendrias que ser soltero.
El taxista se emociona y muy contento le dice:
- Si! Yo soy catolico y soy soltero!
- Entonces, detén el taxi en aquel callejon.
El taxista se mete al callejon donde la monja le cumple su deseo.
Despues de terminado, regresan al camino. Y mientras van circulando, la monja se da cuenta que el taxista empieza a llorar y le pregunta:
- Hijo... ¿Que te pasa ahora? ¿Porque lloras?
- Perdoneme madre, ¡Le he mentido!, yo soy judio y estoy casado.
La monja, cambiando la voz le dice:
- No te preocupes, yo me llamo Roberto y voy a una fiesta de disfraces.
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