El sistema educativo preventivo Salesiano |
El sistema educativo preventivo Salesiano El Sistema Preventivo Salesiano o Sistema Preventivo de Don Bosco, se refiere al método educativo desarrollado por la Congregación Salesiana a partir de la experiencia educativa de Don Bosco . El sistema nació como una respuesta al sistema represivo de educación que primaba en la Europa del siglo XIX y que aún funciona en algunos países del mundo y resultó ser una de las experiencias visionarias más destacadas en el desarrollo de la educación contemporánea. Otros sistemas de educación se han inspirado al sistema preventivo salesiano y éste es materia de permanente estudio y adaptación. En síntesis, sistema preventivo quiere decir "prevenir" al joven de los peligros a los que puede estar sometido y orientarlo a dirigir su vida hacia un futuro mejor. Historia La historia del sistema preventivo salesiano comienza en la historia de vida y apostolado de Juan Bosco (1815-1888 ) en la Turín de la segunda mitad del siglo XIX. Si bien Don Bosco no escribió grandes tratados al respecto, dejó los elementos primordiales que permitirían un desarrollo posterior de lo que él había vivido como una novedosa propuesta educativa que respondía a las necesidades de los jóvenes de su tiempo y de su patria. Según Carlo Nanni, el sistema preventivo no nació en un escritorio ni es fruto de una exclusiva literatura pedagógica, sino que debe ser leido en la persona misma de Don Bosco. De esta manera, quien desee entender las bases fundantes debe antes que nada conocer a profundidad la biografía de Juan Bosco. Nanni define además a Juan Bosco como "hombre de acción" más que como un teórico y, sin embargo, ello no quiere decir que Don Bosco no hubiese dejado algún tipo de tratado al respecto. Las obras de Don Bosco son:
Los historiadores de Don Bosco coinciden en el hecho de que este no dejó un corpus metódico que pudiera ser definido como el estudio metódico del sistema. Este sería tarea de los salesianos. El sistema represivo El concepto de sistema represivo fue definido por Don Bosco en la introducción que él mismo elaboró al Reglamento para las casas salesianas en 1877 . En el sistema represivo, Don Bosco describe la figura del adulto educador como un elemento clave de autoridad: En este sistema [represivo], la palabra y la mirada del superior deben ser en todo momento severas y más bien amenazadoras, y personalmente debe evitarse toda familiaridad con los subordinados. Don Bosco destaca la distancia que existía entre el joven sujeto de la educación y su superior entendido como el educador o profesor en términos modernos. El castigo físico era la única manera de garantizar el orden en este tipo de sistema y del mismo Don Bosco señalaría que este no tiene la garantía de una formación real en valores a largo plazo: El sistema represivo puede impedir un desorden, mas con dificultad hacer mejores a los que delinquen. Se ha observado que los muchachos no olvidan los castigos que se les han dado; y que, por lo general, conservan amargor junto con el deseo de sacudir el yugo de la autoridad y aun de tomar venganza (...). Aunque Don Bosco estaba confrontando un sistema tenido como esencial para la educación de la Europa que él conoció a lo largo del siglo XIX y que enfatizaba la frase "la letra con sangre entra", el sistema represivo sigue siendo en la actualidad una propuesta vista como esencial en muchas regiones del mundo, especialmente en países en vías de desarrollo, pero también en algunas sociedades industrializadas. Según un informe de la BBC , para el 2006 se contaban 109 naciones del mundo que habían abolido el castigo físico dentro de la formación escolar, pero todavía existen sociedades en donde no se concibe una educación sin ellos. El Sistema Preventivo según Don Bosco En contraposición a dicho sistema represivo, que Don Bosco conocía bien y que había sufrido ya como joven de su tiempo, nace la experiencia del sistema preventivo. Ante todo es necesario aclarar que Don Bosco desarrolló este pensamiento con muchachos difíciles al optar por los jóvenes marginales de una ciudad que como la Turín de la mitad del siglo XIX vivía su propia revolución industrial , atraía a niños y jóvenes campesinos empobrecidos y creaba situaciones extremas como pandillas juveniles , niños de la calle , delincuencia juvenil , explotación infantil y otros dramas. Por lo tanto, el sistema preventivo fue sometido en sus inicios a las realidades de punta y no concebido bajo condiciones favorables. Justamente hacia este tipo de jóvenes el sistema represivo estaba más que orientado y de hecho la visita de Don Bosco a las cárceles de Turín atestadas en la época de menores de edad le convencerían de ello. Algunos elementos descriptos por Don Bosco de su sistema preventivo son los siguientes:
Don Bosco resalta las consecuencias del sistema preventivo dentro de la educación del joven: el alumno ganará afecto por el adulto-educador-formador porque lo considerará más que un cuida-chicos, un Padre y un Maestro en el sentido más profundo del término. Así resumiría: "Procure el educador hacerse amar de los alumnos si quiere hacerse temer". Todo niño, incluso el más díscolo, violento o indisciplinado, tiene siempre una esperanza y dentro del sistema preventivo este encontrará un espacio para cambiar, no por medio de la represión y los castigos físicos, sino del diálogo y el sentimiento de ser parte de una gran familia educativa. Por último, Don Bosco resalta que los llamados de atención nunca deben hacerse en público de manera que averguencen al joven, en cambio un sistema de premios a los esfuerzos puede traer mayores beneficios. Cuando el joven es llamado a cuenta por sus acciones, este debe entender bien cuál es la razón de su culpa, mientras que Don Bosco prohibe estrictamente cualquier acción violenta en contra de los muchachos: El pegar, de cualquier modo que sea, poner de rodillas en posición dolorosa, tirar de las orejas y otros castigos semejantes, se deben evitar absolutamente, porque están prohibidos por las leyes civiles, irritan mucho a los alumnos y rebajan al educador. Ciertamente Don Bosco habla de las realidades que en la educación de su tiempo se vivían, pero que hoy pueden ser vistas aún incluso en sociedades de un supuesto desarrollo social. Por otra parte, Don Bosco insiste en que los alumnos deben conocer muy bien los reglamentos y comprenderlos como parte de su caminar formativo. La norma no debe ser una sorpresa para el joven.-
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